Oraciones no contestadas.

Estén siempre alegres, oren sin cesar, den gracias a Dios en toda situación, porque esta es su voluntad para ustedes en Cristo Jesús.1 Tesalonicenses 5:16-18

 No se inquieten por nada; más bien, en toda ocasión, con oración y ruego, presenten sus peticiones a Dios y denle gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, cuidará sus corazones y sus pensamientos en Cristo Jesús. Filipenses 4:6-7.

Quiero iniciar estas líneas con estos estos versículos, porque desde hace un buen tiempo son los que han estado muy presentes en mi diario vivir. Hoy quiero escribirles acerca de esas oraciones que parece que Dios no ha escuchado, que pasa el tiempo y vemos que nada sucede o quizás sí, pero no nos hemos dado cuenta de eso.

¿Alguna vez has sentido que tus oraciones no son contestadas?

Muchos se preguntan por qué las oraciones que hacen no son contestadas. Algunas personas hasta dejan de orar, pues sienten que sus oraciones no son escuchadas.

Pueden existir varias razones por las que Dios no esté respondiendo nuestra oración. Quizás haya algo en nuestra vida que nos esté impidiendo escuchar su voz, o que no le hayamos estado pedido de acuerdo a su voluntad.

Bueno quiero contarles que tiempo atrás estaba orando por una situación en específico, pasaban los días, pasaron dos meses más o menos y nada pasaba. Yo pensaba -será que estoy orando mal o que es lo que sucede- ya en un punto de tristeza. Yo estaba orando a cómo quería que fuera la respuesta, pero como nada sucedía cambie mi oración a -Padre que sea tu voluntad-. Sorprendentemente esa oración fue contestada pero no a mi manera sino a la manera de Dios, para serles sincera sentía una mezcla de emociones porque fue todo lo contrario a lo que yo quería, sin embargo en medio de todo eso escuche a Dios susurrarme –Querías que pasara algo y algo pasó, pero a mi voluntad y esto es lo mejor para ti.

No les puedo explicar todo lo que sentía, en realidad estaba molesta porque no entendía, yo quería que todo fuera diferente. Pero hasta hoy puedo entender que Dios tenía la razón como siempre y que mis oraciones no son contestadas a mi voluntad, sino a la suya.

A lo largo de nuestro caminar con Dios vamos a experimentar y conocer muchos aspectos de su naturaleza como creador, pero también como Padre, que difícil es entender que Dios contesta en base a lo que Él sabe es lo mejor para nosotros sus hijos.

Ésta es la confianza que tenemos al acercarnos a Dios: que si pedimos conforme a su voluntad, él nos oye.1 Juan 5:14

La pregunta que tendríamos que hacernos es ¿De qué manera estoy orando? Tristemente muchas personas solo se acercan a Dios porque lo ven como en la película, donde solo frotas una lámpara, aparece un genio y cumple todos los deseos, pero no.Dios no es así. Si algo he aprendido en este proceso es que habrá veces en las que Dios no me dará ‘algo’, porque prefiere mi corazón a que ese ‘algo’ pueda alejarme de Él, me conoce mejor que nadie.

El desea ser amado y buscado por la misma razón. Orar para mí es esa relación vital, dónde quiero ser escuchada y escucho, donde muchas veces estaré feliz por la respuesta y donde otras quizás no, esa voz sin la cual no puedo seguir día a día pues es la que me alienta y me da dirección.

Tal vez tu oración ya ha sido contestada, pero no te has dado cuenta.Tal Vez aún no y por eso te pido que no te canses de orar y  creerle, él sabe y conoce los tiempos mejor que tú y yo. No te rindas aunque todo se vea mal, sigue orando y confiando totalmente en tu Padre.

No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia. Isaías 41:10

Para terminar no creas que Dios no te escucha, Él contesta, claro que sí, solo mantente a la expectativa de eso, ten fe esa que enciende las oraciones que parecían estar muertas, la que te lleva a creer la milla extra, a confiar en la providencia de aquel que te sostiene, te ayuda y te levanta para seguir orando.¡Ánimo!

¡Dios te bendice!