De lo ordinario a lo extraordinario.

¿Les había comentado que a principios de este año había empezado a leer toda la biblia en un plan de YouVersion?

Pues como en algunas cosas, me he dado cuenta que los principios siempre son buenos, pero luego cuando te acomodas, las cosas se vuelven mas monótonas. Hay una frase que siempre le llevo en mi corazón que es: “No vuelvas lo extraordinario en ordinario” Y precisamente es lo que me paso el mes pasado (mayo) con la lectura en un año de la biblia.  Creo que hice de la lectura bíblica una lectura más, como en cualquier otro libro me pudo pasar, llego un momento que ya no le di la importancia que se merecía. Hice que lo mas santo se volviera algo común.

¿Cómo llegamos a esto? ¿Cómo permitimos que una cosa tan importante llegue a ser algo común en nuestro día a día? Los que viven en paraísos naturales podrán comprender lo que les diré o los que vivan en cualquier centro turístico. Hace unos días hablaba con personas que viven en una de las playas más hermosas de Colombia, también estaban unas personas del lago más hermoso de Guatemala y los dos concordaron en algo, que eso tan extraordinario se vuelve algo mas del día a día y en ocasiones no le toman la importancia debida. Simplemente se vuelve algo más.

Lastimosamente pasa lo mismo con Dios. Llegamos a un punto donde lo más extraordinario se vuelve ordinario. Aquello que nos asombraba y maravillaba se vuelva algo normal y natural, por eso Jesús dijo:

Y llamando Jesús a un niño, lo puso en medio de ellos, y dijo: De cierto os digo, que, si no os volvéis y os hacéis como niños, no entraréis en el reino de los cielos. Mateo 18:2-3 RV1960

Y una de las cualidades buenas de los niños, aparte de su pureza es su capacidad de estar asombrados por todo, aunque ya lo hayan experimentado en más de una ocasión.

En estas semanas se estrenó “Toy Story 4” una saga de Disney Pixar que lleva casi 24 años en las salas de cine. Yo crecí viendo estas películas y me emociono las veces que veo la primera, la segunda y la tercera parte. Aunque ya no soy un niño pequeño, lo sigo haciendo. Cuando veo a un niño ver alguna película de estas y miro su asombro, aunque ya la haya visto, confirmo que su capacidad para asombrarse es maravillosa.

Y esa misma actitud debemos tener nosotros con La Presencia, Su Palabra y El amor de Dios para nosotros. Estamos tan acostumbrados a tenerla todos los días que llega un punto que perdemos el asombro y volvemos algo extraordinario en algo ordinario.

En la vida cristiana no siempre son buenos momentos que nos hacen disfrutar la vida espiritual al máximo. Ojalá lo fueran, pero en realidad también hay altibajos. Momentos que no nos “dan ganas” de hacer lo que debemos de hacer. Altibajos que nos tiran al suelo y hacen que nuestra vida espiritual caiga. Pecado, afanes terrenales, alguna enfermedad o cualquier otra situación difícil. No lo se cual sea tu situación, pero lo que si se decirte es que Dios sigue siendo igual y su gran amor no se acaba.

Tal vez hayas pensado que ya has experimentado todo de Dios, pero no es así. No te imaginas todo lo que Dios tiene para nuestra vida. Cuando pensamos que estamos en un lugar extraordinario con Él, Dios nos lleva mas profundo y nos muestra cosas extraordinarias, pero dice:

Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan” hebreos 11:6 RV1960

Mientras más te acercas a Dios, mientras mas lo buscas, mientras mas persistes, Dios te llevara a nuevos lugares. Mientras mas busques a Dios aun cuando creas que ya no es tan asombroso, como cuando lo hacías las primeras veces; Dios volverá eso “ordinario” en algo extraordinario.

No pierdas la capacidad de asombroso porque aun no has vivido todo aquello que Dios quiere mostrarte. Aún hay más.

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Luis fernando Quijivix

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