«Aprendiendo de los errores: una oportunidad para crecer»

¿Y si viéramos la equivocación como una oportunidad de aprender?
Nos enseñan desde chiquitos nuestros padres que cuando rompemos algo sin querer o cometemos un error esta mal y después en la escuela nos enseñan a aprobar todo de lo contrario sos un fracaso. Estamos condenados a la perfección constante. Y estamos condicionados por el error.
Es como las propagandas o las publicidades de como ser una mujer u hombre de éxito. Constantemente hay que producir resultados. Pero Dios nos habla de procesos, de transformación a través de los cuales tenemos que pasar. Él nos enseña a esperar, a tener paciencia mientras que el mundo vive en un proceso acelerado de querer todo ya.
Cuando hay otra realidad que nos golpea: no existe la perfección. Si podes ir mejorando, pero no ser perfecto.
Hay otro problema: SOS HUMANO.
Por lo tanto muchas veces vas a fallar o equivocarte por eso Dios no nos hizo perfectos.
Incluso si pecamos creemos que Dios nos va a castigar, se va a enojar o no nos va a amar más. Vivimos con la culpa constante y la presión de no fallar nunca. Pero la verdad es que siempre nos vamos a equivocar, vamos a cometer errores y pecar .Vamos camino a la perfección pero eso no quiere decir que vayamos a serlo o que lo seamos. Y otra cosa importante es que el amor de Dios por nosotros nunca cambia, siempre nos va a amar no importa lo que hagamos. Él es amor, es misericordioso, paciente y fiel. Y siempre nos motiva cuando las cosas no salen como quisiéramos.
Debemos deshacernos de esa mentalidad que no será fácil porque nos la inculcan desde nuestra infancia y viene de muchas años atrás y la sociedad nos bombardea continuamente con toda esa publicidad. Incluso con tener un cuerpo perfecto, tener ropa o el celular más nuevo. Vivimos en una sociedad de consumismo. Por eso hoy día tantos jóvenes sufren depresión, bulimia, anorexia, estrés, entre otras.
Todo esto lleva más y más a centrarnos en nosotros mismos y el ego.
Por esto mismo tenemos que amarnos como Dios nos creó, aceptarnos y enfocarnos en Él. No es fácil porque hoy día con las distracciones como las redes sociales, el celular y todo lo tecnológico nos roban mucho tiempo. Pero no es imposible, tenemos que cambiar nuestros hábitos y enfocarnos en Dios.
Dios te ama tal cual sos y quiere tener una relación con vos.
«Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas». Mateo 6:33
No hace falta que busques llenar tu vacío con cosas que no van a llenarte. Él único que puede llenarte con su amor eterno es Dios, buscalo a Él. No hay nada en el mundo que pueda saciarte más que Dios. Pero no vivas enfocado en vos porque así vas a buscar satisfacer tus propios deseos y necesidades con cosas que no lo valen.
”Jehová se manifestó a mí hace ya mucho tiempo, diciendo: Con amor eterno te he amado; por tanto, te prolongué mi misericordia». Jeremías 33:3
Dios nos ama y puede suplir cualquier necesidad. No hay nada ni nadie como él. Su amor puede sanar todas tus heridas y carencias. Porque él es la fuente de vida y es el refugio al que podemos acudir siempre estemos bien o mal. Pidamosle sin miedo, seamos sinceros con él que siempre nos va a escuchar y sigamos su camino. Y no te eches la culpa de lo que hiciste; ya está. Aprende del error y seguí adelante que para eso estamos para aprender y que nos enseñen. Recorda que todos cometemos errores pero es tu actitud la que determina todo.
Dios te bendiga! Ánimo, fuerza.